Sin embargo, no es sencillamente un miedo, pues guardan grandes diferencias.
También se suele catalogar como fobia un sentimiento de odio o rechazo hacia algo que, si bien no es un trastorno de salud emocional, sí genera muchos problemas emocionales, sociales y políticos (véase xenofobia, es decir, el odio a los extranjeros o extraños).
Un estudio en EE. UU. por el National Institute of Mental Health (NIMH) halló que entre el 8,7% y el 18,1% de los estadounidenses sufren de fobias.
Discriminando edad y género, se encontró que las fobias son la más común enfermedad mental entre mujeres en todos los grupos etarios y la segunda más común psicopatía en hombres mayores de 25.
CAUSAS
La angustia
generada frente a lo desconocido o ante el peligro
se considera un fenómeno que está al servicio de
la protección o el cuidado de la especie. En estas
situaciones se desencadena en el organismo una serie de procesos
reguladores de la respuesta. Las fobias serían
reacciones anómalas y desproporcionadas causadas
por estímulos potencialmente peligrosos. Algunos
autores postulan la existencia de factores
genéticos causantes de la enfermedad, ya que se ha
demostrado una mayor frecuencia de ellas entre parientes
de primer grado y por estudios efectuados en mellizos idénticos
que padecen el trastorno y que se han desarrollado
en ambientes diferentes. Se piensa que serían
varios los genes involucrados y se intenta
identificarlos en algún cromosoma.
Las investigaciones biológicas han podido detectar algunas relaciones entre la serotonina y ciertas fobias.
Las investigaciones biológicas han podido detectar algunas relaciones entre la serotonina y ciertas fobias.
CLASIFICACION
Antiguamente la
fobia se incluyó dentro del grupo de las neurosis
basado en los postulados de Freud, quien propuso que en esta
enfermedad existe "un desplazamiento" de temores
internos intolerables para el sujeto por lo que debe sacarlos
de sí, librarse de ellos y depositarlos en objetos
externos.
La nosología actual propone dividir las fobias en simples y complejas basándose en criterios puramente descriptivos sin pronunciarse sobre posibles causas, las que por cierto son aún poco conocidas e incompletas.
La Clasificación Internacional de Enfermedades (ICD-10) y el Manual Diagnóstico y Estadístico de los trastornos mentales DSM-IV (Estados Unidos)ordena las fobias según los siguientes criterios:
La nosología actual propone dividir las fobias en simples y complejas basándose en criterios puramente descriptivos sin pronunciarse sobre posibles causas, las que por cierto son aún poco conocidas e incompletas.
La Clasificación Internacional de Enfermedades (ICD-10) y el Manual Diagnóstico y Estadístico de los trastornos mentales DSM-IV (Estados Unidos)ordena las fobias según los siguientes criterios:
AGORAFOBIA
Es la forma más
frecuente de presentación de las fobias. Lo
esencial es el miedo intenso a encontrarse solo o
de hallarse en lugares públicos llenos de gente.
La angustia es severa y puede estar o no asociada a Crisis
de Pánico. La asociación de estos dos tipos
de trastornos es frecuente siendo posible la presencia de
crisis de varias veces al día o en la semana. El diagnóstico
preciso de agorafobia con o sin crisis de pánico
es indispensable dado que ellas tienen diferencias
fundamentales en el tratamiento farmacológico.
FOBIA SOCIAL
La sensación de
angustia que se produce en ciertas situaciones
sociales como hablar en público o durante una entrevista
de trabajo debe ser considerada como normal y corriente para
la mayoría de las personas. En los casos de fobia
social la angustia es intensa y habitualmente está
asociada a descarga del sistema nervioso autónomo
lo que provoca sudoración, palpitaciones, temblor
y disnea. El sujeto refiere sentirse expuesto a
la observación o el escrutinio por parte de los
demás, lo cual le hace temer no poder hablar en
público, ser observado al comer o al orinar en un
baño público o no poder controlar las manos
temblorosas al escribir. Generalmente la fobia social
se limita a una sola de éstas conductas.
Este padecimiento se inicia generalmente en la adolescencia y es algo más frecuente en mujeres. El curso es de tipo crónico y rara vez produce incapacidad importante, excepto limitaciones en la vida laboral y/o social. Una complicación frecuente en estos casos es la tendencia al abuso de alcohol y de tranquilizantes. En un porcentaje importante hay baja autoestima y depresiones recurrentes.
Este padecimiento se inicia generalmente en la adolescencia y es algo más frecuente en mujeres. El curso es de tipo crónico y rara vez produce incapacidad importante, excepto limitaciones en la vida laboral y/o social. Una complicación frecuente en estos casos es la tendencia al abuso de alcohol y de tranquilizantes. En un porcentaje importante hay baja autoestima y depresiones recurrentes.
FOBIA SIMPLE
Se la denomina
también como "fobia específica" por ser única en
relación al objeto provocador de la ansiedad. Se
la diagnostica preferentemente en niños y de sexo
femenino y los temores se manifiestan referidos a
ciertos animales, como perros, ratones o caballos, también
se le puede observar relacionada a las alturas, rayos y truenos
o a la oscuridad de la noche.
La mayor parte de las fobias de la niñez requieren solamente apoyo y refuerzo conductual simple el que habitualmente se produce espontáneamente en la familia. Especial cuidado debiera tenerse con aquellos niños aparentemente normales que se "dedican a escuchar música, ver televisión indiscriminadamente y sin salir de su pieza. En ocasiones presentan reacciones impulsivas y agresivas y refieren no tener interés por salir y tener amigos". Muchos de estos casos pueden corresponder a inhibiciones de carácter fóbico. Ellos deberían ser evaluados por un especialista y eventualmente ser tratados. Las fobias que persisten en la edad adulta se complican con el abuso de alcohol y tranquilizantes y necesitan a menudo tratamientos prolongados y complejos.
La mayor parte de las fobias de la niñez requieren solamente apoyo y refuerzo conductual simple el que habitualmente se produce espontáneamente en la familia. Especial cuidado debiera tenerse con aquellos niños aparentemente normales que se "dedican a escuchar música, ver televisión indiscriminadamente y sin salir de su pieza. En ocasiones presentan reacciones impulsivas y agresivas y refieren no tener interés por salir y tener amigos". Muchos de estos casos pueden corresponder a inhibiciones de carácter fóbico. Ellos deberían ser evaluados por un especialista y eventualmente ser tratados. Las fobias que persisten en la edad adulta se complican con el abuso de alcohol y tranquilizantes y necesitan a menudo tratamientos prolongados y complejos.
TRATAMIENTO
Dado el tipo especial del carácter del fóbico su sintomatología puede pasar desapercibida por años. La persona utiliza mil argucias para ocultar sus miedos y los medios para tranquilizarse. Sin embargo, después de largo tiempo de lucha y por alguna situación de crisis las defensas caen, lo que lleva al sujeto a presentar síntomas severos de ansiedad o depresión. Es en este momento cuando se decide consultar al médico.
También es posible observar que el cuadro se estabilice, incluyendo los síntomas molestos, si las conductas de evitación y de tranquilización han sido eficaces, por lo que el estado evoluciona hacia la cronicidad.
El abordaje terapéutico de los pacientes que padecen de fobias debe efectuarse sobre la base de utilizar medidas farmacológicas y otras de tipo no farmacológicas. Se recomienda el uso de los siguientes fármacos: benzodiazepinas, por ejemplo alprazolam, diazepam o clorodiazepóxido, solamente cuando la ansiedad es muy limitante y por tiempo breve (días o pocas semanas ). Estos medicamentos actúan reduciendo la molesta ansiedad anticipatoria, con lo cual se logra romper una parte significativa del círculo vicioso que subyace a todas las fobias. Dada la frecuencia y estrecha relación entre la ansiedad y la depresión debe considerarse la posibilidad de utilizar algún medicamento antidepresivo, especialmente en los pacientes que sufren de Agorafobia.
Las personas con fobia social experimentan las molestias generalmente ante situaciones determinadas y predecibles, lo cual hace posible que ellos se beneficien del uso de medicamentos solamente antes de enfrentarse a las situaciones sociales que provocan la ansiedad , puede ser útil propanolol, tomados 30-60 minutos antes de la exposición temida ; alivia notoriamente la taquicardia, sequedad de boca o el temblor de manos en aquellos individuos que sufren de ansiedad de rendimiento.
Numerosos estudios clínicos han confirmado la eficacia de la aplicación de terapias cognitivas y conductuales en las diversas formas de fobias, especialmente en la fobia simple y la fobia social. Las terapias conductuales se basan en el postulado de que estos pacientes han aprendido respuestas de ansiedad mal adaptadas, por lo cual las terapias pretenden que esas respuestas sean re-aprendidas o sustituidas por conductas de mayor capacidad adaptativa. Se ha obtenido éxito con técnicas de desensibilización progresiva, técnicas de exposición programada, técnicas de relajación, etc., las que deben desarrollarse por personas entrenadas y calificadas.
El envío al psiquiatra debe tenerse presente en aquellos casos que no respondan a las medidas terapéuticas habituales. Será importante para reevaluar dudas disgnósticos y/o para tratar complicaciones como pueden ser alcoholismo o dependencia a psicofármacos.
